Próxima a inaugurar una muestra individual en el Centro Cultural Gabriela Mistral, quisimos conocer más sobre la destacada artista, y socia del NMWA-Chile, Liliana Iturriaga, cuya obra visual explora el movimiento y las superposiciones de la línea, generando atmósferas contemplativas.
Liliana vivió en Venezuela por más de treinta años, donde se graduó de la Escuela de Diseño del Instituto Brivil en Caracas, y en donde comienza también su cercanía visual con el cinetismo. El 2008 regresa a Chile, continuando su formación artística en el Taller de Serigrafía de la Escuela de Arte de la Universidad de Chile, con el profesor Cristóbal Bouey en el año 2013. Luego cursa el Taller de Color del Diplomado de Arte de la Universidad Católica, con el profesor Eduardo Vilches, en 2014, bajo las enseñanzas de la corriente del Bauhaus. Y en 2021 comienza el Diplomado de Historia de las Artes en la Pontificia Universidad Católica de Chile.
Ha expuesto en numerosas exposiciones colectivas e individuales, tanto en Chile como en el extranjero. Su obra es parte de la colección permanente del MACBA, en Buenos Aires, y en el Museum of Geometric and MADI Art, en Dallas y de la Colección Ralli. Su exhibición “Concéntricos” en el Museo Nacional de Bellas Artes, el 2022, tuvo una gran recepción por parte del público y de la crítica especializada.
- Estás pronta a inaugurar una nueva muestra en uno de los principales espacios culturales del país. ¿Qué significa para tu carrera este nuevo desafío?
Este nuevo desafío representa una gran oportunidad para consolidar mi trayectoria artística. Exponer en el Centro Cultural Gabriela Mistral, un lugar tan icónico y relevante para el arte contemporáneo en Chile, es un honor. Me permite conectar con una audiencia amplia, transversal y diversa, y también es una ocasión para presentar una nueva etapa y nuevos procesos cinéticos, sobre todo en lo que se refiere a cómo es fusionar las formas angulares con las líneas orgánicas.
Es un desafío, ya que se incorpora el muralismo y elementos arquitectónicos dentro de la obra con diversidad de materiales, donde se integra el video mapping con el apoyo de EPSON y una gran puesta en escena del colectivo Delight Lab el día de la inauguración y en colaboración con CENIA viviremos una experiencia cibernética. Además, habrá un espacio para explorar la obra por medio de realidad virtual en colaboración con TitanGroup.
Macri Arquitectos ha sido un gran apoyo durante la preparación de la muestra y por supuesto con la constante ayuda del equipo de GAM.
- ¿Cómo nace tu acercamiento con el arte?
Mi acercamiento al arte se dio de manera natural. Estudié Diseño en Venezuela, donde viví por más de 35 años, y fue allí donde me conecté por primera vez con el cinetismo, movimiento que influenció fuertemente mi obra. Después, al regresar a Chile, me enfoqué en continuar mi formación a través de diversas disciplinas, como la serigrafía en la Universidad de Chile y el estudio del color con el profesor Eduardo Vilches en la Universidad Católica de Chile y actualmente terminando un diplomado en Teoría de las Artes Visuales.
- ¿Crees que es más difícil el camino para las mujeres artistas, y por qué?
Definitivamente, el camino para las mujeres en el arte ha sido históricamente más difícil. Aunque se han dado pasos importantes hacia una mayor equidad, todavía existen barreras y prejuicios que las artistas deben enfrentar. Sin embargo, veo con optimismo el panorama actual, en el que cada vez más mujeres están siendo reconocidas por su talento y esfuerzo.
- Tu obra innova en el uso de la tecnología como soporte visual, ¿Hay alguna artista mujer que haya sido tu referente en este sentido, o bien, alguna que te gustaría destacar por su espíritu innovador?
Admiro profundamente a artistas como Lygia Clark y Gego, quienes también exploraron la tridimensionalidad, el espacio y el movimiento desde perspectivas muy innovadoras. Aunque trabajaron en contextos distintos al mío, sus experimentaciones en el arte geométrico y cinético me inspiran mucho.
- ¿Qué te gustaría transmitirle a las nuevas generaciones de mujeres en el arte?
Mi mensaje para las nuevas generaciones de mujeres artistas es que sean valientes y que no teman experimentar. El arte es un espacio de libertad, donde cada una puede encontrar su propia voz y lenguaje. Les diría que persistan y que no se rindan frente a las dificultades. También creo que es esencial seguir formándose en el contexto histórico y cultural del arte, para así poder nutrir y profundizar sus propios procesos creativos.
