Categorías

Pilar Garrido, ganadora del concurso de canto lírico "Mujeres en la Música V"

Pilar Garrido, ganadora de Mujeres en la Música V: “la visibilidad de este concurso me ayudará a obtener nuevas oportunidades”.

Pilar Garrido, destacada soprano chilena, ha conquistado recientemente el Primer Premio en el certamen “Mujeres en la Música V”, sumando este galardón a una lista de éxitos que incluyen el Primer Premio en el Festival Internacional de Canto Verónica Villarroel 2020 y el Tercer Premio en el Concurso Latinoamericano de Canto de la Radio Filarmonía en Perú 2023. 

 

Titulada en Interpretación Musical por la Universidad de Chile, Pilar ha perfeccionado su técnica y estilo en el Centre de Perfeccionament del Palau de Les Arts en Valencia, además de debutar como solista con la Orquesta Sinfónica de Chile en el “Réquiem Alemán” de Brahms. Su nombre se destaca en el ámbito internacional, no solo por sus logros en concursos, sino por sus interpretaciones en óperas clásicas como “Die Zauberflöte” y “La traviata”. Su próximo destino es Bulgaria, donde se integrará al ensamble de la Ópera de Varna como Guest Artist.

 

¿Qué significado tiene para ti haber ganado el Primer Premio en “Mujeres en la Música V”, y cómo crees que influirá en tu carrera?

 

El primer premio es un anhelo tremendo que le da sentido a años de trabajo en el canto. Creo que la visibilidad de este concurso me ayudará a obtener nuevas oportunidades artísticas, incluyendo el recital que haré gracias al concurso en Estados Unidos, en donde cantaré por primera vez.

  

Tras tu experiencia en el Centre de Perfeccionament del Palau de Les Arts en Valencia, ¿cuáles fueron los aprendizajes más valiosos y cómo influyen ellos, en tus próximos proyectos en Europa?

 

Los dos años de trabajo en el Palau fueron un intenso periodo de experiencia escénica y estudio sistemático de nuevos repertorios. Aprendí a tener un nivel de exigencia personal mucho más alto que antes, gracias al trabajo con diversos maestros y directores y la alta competitividad del medio europeo. Creo que el ser disciplinada, fijarse en los detalles y buscar un sello artístico personal,  han sido fundamentales en las posibilidades que se han abierto para mí en el mercado internacional y en mi desempeño profesional también en Chile.

 

Al mirar tu evolución profesional, desde tus inicios hasta tu reciente proyección internacional, ¿qué consideras como los mayores desafíos para los jóvenes cantantes en Chile?

 

Creo que los desafíos de hoy para esta carrera abarcan muchos aspectos distintos; primero tenemos una inmensa distancia física con Europa, que nos aleja de las cosmovisiones que rodean la música y los compositores que solemos estudiar. Podemos cantar un hermoso lied sobre un blanco paisaje invernal alemán sin jamás haber visto siquiera nevar en Santiago de Chile. Es difícil interpretar lo más fidedignamente posible, algo que no hemos vivido nunca. Por otra parte, la carrera de cantante lírico es bastante cara en muchos aspectos; clases de canto, coach de diversos idiomas, viajes para audicionar, costos de vida en general, ropa formal, ropa de gala, maquillajes, zapatos y así una larga lista de cosas que necesitamos para lograr una imagen y desempeño profesionales. La mayoría de los jóvenes estudiantes en Chile no cuentan con los recursos económicos suficientes para realizarlo.

Entre muchos otros desafíos, la alta competencia y los pocos puestos de trabajo son la guinda de la torta; hay que estar muy dispuestos a dar nuestra mejor actuación a cambio de nada, a soportar el fracaso 20 veces para obtener 1 sí y a invertir tiempo, mucho esfuerzo y dinero en puertas que muy probablemente no se abran. Es una carrera dura en muchos aspectos para los latinos que nos dedicamos a hacer música europea, sin contar con el dolor de dejar la patria, la familia y todo lo conocido por perfeccionar este arte que amamos tanto.

 

Pronto te unirás al ensamble de la Ópera de Varna en Bulgaria como Guest Artist. ¿Qué expectativas y objetivos tienes para esta nueva etapa en tu carrera?

 

Me siento muy agradecida de Varna, pues me han abierto las puertas y han confiado en mí para debutar roles protagónicos en óperas de repertorio. El trabajo es bastante rápido, pues se hacen muchas óperas al mes y la mayoría de las producciones han sido estrenadas hace años y simplemente siguen representándose. Siento que ganaré muchísima experiencia escénica y compartiré con colegas, cantantes de otros lugares del mundo, lo que es siempre edificante a nivel personal y enriquecedor profesionalmente. 

También me entusiasma mucho cantar en un país tan diferente al mío, la forma de trabajar y la cultura nueva son un desafío más a enfrentar.

 

Habiendo participado en destacados festivales y concursos internacionales, ¿cómo percibes la valoración de la ópera en Chile en comparación con el panorama internacional, y qué crees que se podría mejorar?

 

He observado que en varios países europeos, los cantantes tienen en sus teatros más cercanos posibilidades de trabajar de forma estable como cantantes de un ensamble o en el coro. También se facilita bastante el hecho de ser freelance porque con un tren o un vuelo de 2 horas estás en otro teatro haciendo producciones internacionales. Me encantaría que en Chile nuestros teatros regionales pudieran tener orquesta, coro y ensambles fijos. Que el hecho de ser cantante de ópera sea considerado un trabajo tan normal como el de un abogado. Creo que nos falta muchísimo avanzar en espacios para ejercer la carrera y ganar experiencia escénica, que es tan necesario como el estudio en el aula. También nos vendría bien diversificar nuestros públicos, para que este arte llegue a más oídos y le dé a las personas la hermosa oportunidad de vibrar con el canto, con la escena.